Ha acabado el 4º día en las manifestaciones en España para la liberación de Pablo Hasél

Siguen las protestas en el quinto día que transformaron en vandalismo y continuadas para la liberación del rapero Pablo Hasél prisionado el 16 de febrero por haberse condenado en España a causa de enaltecimiento de terrorismo.

Las manifestaciones sin permiso y concentradas en Barcelona, Lleida, Girona, Tarragona y Valencia, fueron acudidas por los jóvenes de los grupos ultraizquierdistas y los estudiantes universitarios. Algunos grupos incendiaron las basuras, perjudicaron las tiendas, los bancos y los vehículos en la ruta de manifestación también tiraron piedras y botellas a la policía.

Hubo saqueos en algunas tiendas y ataques contra una comisaría y algunos manifestantes tiraron piedras a los ciudadanos que les protestaron desde sus casas. Las fuentes de policía declaran que fueron detenidas 3 personas en Barcelona, 2 en Girona y hay heridos en los disturbios.

Las manifestaciones organizadas por las organizaciones ultra izquierdistas que causaron la detención de cerca de 95 personas dejando atrás cerca de 00 heridos en los últimos 4 días, seguirán con alta participación en el fin de semana. Hasél fue condenado a la prisión de 9 meses por algunas expresiones utilizadas en Twitter y sus canciones. Hasél se acusa por enaltecer el terrorismo e insultar al rey y las instituciones estatales.

Por otra parte, el partido Unidas Podemos, socio en el Gobierno de coalición, expresó su apoyo al rapero y solicitó al Ministerio de Justicia que interviniese en el caso alegando injusticia en la sentencia.

Hasél también fue sentenciado a 2,5 años de prisión por amenazar a un testigo durante un juicio.

El primer ministro español, Pedro Sánchez, mostró su reacción a las manifestaciones que siguen desde hace tres días y que se convirtieron enactos de violenciacon la petición de liberación del rapero Pablo Hasél arrestado el pasado martes: ““España es un país donde hay democracia plena y sea de la forma que sea, es inadmisible el uso de la violencia en países democráticos. No hay nada que puede justificar la violencia. La violencia no es una libertad, es un asalto a la democracia y la libertad de otros. El gobierno se hará frente a cada tipo de violencia y garantizará la seguridad de los ciudadanos”.